jueves, 7 de julio de 2011

La Vergüenza

La personalidad inicialmente sirvió como los "ojos y los oídos" del ESPÍRITU sobre este planeta; pero hace muchísimo tiempo, cuando decidimos jugar el juego de la separación, la personalidad asumió una identidad separada de la del ESPÍRITU y nosotros conformamos un ego externo para asumir el papel del ESPÍRITU y determinar qué era real y qué hacer al respecto. Para mantener al ego externo inconsciente respecto al hecho de la separación del ESPÍRITU (lo que se denomina la "caída del hombre") depositamos  una energía muy particular en la estructura genética. Esta vibración se siente ligeramente distinta para cada persona: algunos se sienten como si fueran los "ángeles caídos", otros se sienten como si en cualquier momento los fueran a pillar, agarrar, sorprender o cachar cometiendo una terrible ofensa y otros, como si estuvieran sucios y embarrados. La gente hará grandes esfuerzos para evitar estos sentimientos de no ser merecedor. Intenten observar algunos de los acontecimientos de sus vidas desde esta perspectiva. ¿Ven a lo que me refiero?

          La compensación por la vergüenza se demuestra de muchas maneras distintas: elitismo o competencia, por ejemplo. Cuando uno se siente separado de los demás y, ni siquiera está seguro de que existe algo llamado ESPÍRITU, es inevitable que el ego-externo busque seguridad tratando de ubicarse lo más alto posible en la escala, en comparación con los demás. La razón por la cual las noticias de TV se centran en la muerte, en la ruina y en el desastre es la de permitirle a la gente sentir que alguien, en algún lugar, la está pasando peor que uno mismo y que uno esté temporalmente un poco más protegido porque sencillamente no le tocó hoy. Sintiéndose cercenada del ESPÍRITU, la personalidad ve a la vida casi como un castigo, en vez de un regalo, o de una oportunidad para expresarse, con lo cual la expresión "sentencia de muerte" (N. De los T: En inglés se dice "Cadena Perpetua" o "life sentence") adquiere todo su real significado.

Lo importante a saber acerca de esta vergüenza, es que uno la hereda en sus genes. En el Planeta Tierra esto ya viene como parte del programa pero está tan enraizada como parte del cuerpo físico que jamás nos ponemos a examinarla cómo lo que es: una condición de estar encarnado. Y cada vez que alguien dice algo como esto: "Deberías sentirte avergonzado de ti mismo", el cuchillo se remueve en la herida, porque a un nivel muy profundo, uno está de acuerdo con ello.

Por supuesto, todos dispusimos que el juego de la separación fuera de esta manera. No era posible sencillamente ponerse a simular que estábamos separados del ESPÍRITU. Había que volverlo muy real para que el juego funcionara y hemos encontrado que la vergüenza ¡funciona muy bien, de hecho! La vergüenza reside en el centro de cada célula del cuerpo físico de uno. Normalmente al morir, podemos dejar esta vergüenza detrás de nosotros, en las células, pero para poder ascender con el cuerpo, esta energía debe ser liberada de sus células.

Más adelante les platico formas en las que nos podemos liberar de estas mismas!, el otro día hablando de virus y bacterias con mi amigo Jorge, le comentaba que también ellos tienen en su estructura de ADN esta misma programación y cuando logramos observar a uno de ellos que se encuentra dentro de nuestro cuerpo, con intención firme lo observamos y le decimos, heeyyyyy!!! que haces aquí??
el microorganismo activa su memoria de vergüenza e inmediatamente se siente culpable, y con solo ese hecho abandona el cuerpo porque fue pillado!!!

Acaso  no es una maravilla la forma en la que la mente funciona?? 

1 comentario:

  1. ¡Wow! Ahora se puede ver más claro, pero hay que seguir estando en contacto con la escencia para poder ver todo esto, pues es muy bonito leerlo, el chiste es llevarlo a la práctica.

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